2/20/2007

Robertone

Hace rato que está claro, se decía Robertone, saturado, para sí, que para mí ya se ha extinguido el tiempo celeste. Ahora es como si todo se hubiera señido a una abstracta y por lo mismo duradera dimensión, un orden "natural".
¿Qué aprendí? ¿Qué cosa supe o fui a través de las horas de toda una década y media empeñado en conquistar una forma para mi lengua?

1 comentario:

Javier H dijo...

Estamos empeñados en gastar el tiempo, esperanzados, con una ilusión a veces un poco feliz y trabajando para darle forma a la lengua. Fer después de leer este texto me quede pensando. Y no creo que las puntas de las lanzas sean comparadas con una lengua solo por su forma.